Nos volvemos a reunir en la sección de ciencia ficción para hablar esta vez de un tema quemadísimo, poco original pero que aún así nos encanta: la Star Wars Manía, esa locura total que hay en el mundo sobre una serie de películas que a medidas que pasan los años se va a haciendo más longeva, pero que junto a ese crecimiento también crece exponencialmente el número de fans.
Es que todo esto viene a tono con la histeria general que se generó cuando el pasado viernes se estrenó a las 12 del mediodía de nuestro país el tan ansiado tráiler de “Star Wars Episodio VII: El Despertar de la Fuerza”, que ya actualmente en su canal de Youtube posee más de 40 millones de visitas. Sí, 40 millones en tan solo 4 días.
Ahora… ¿se puede hacer un pequeño análisis de esta locura por la saga de ciencia ficción más taquillera de la historia? ¿Se puede decir “esto nos encanta por tal y tal cosa”? Probablemente no, probablemente muchos fans dirían que el amor viene del corazón y no de lo objetivo, pero el intento de esta nota es desglosar un poco esto y hacer, muy a groso modo y con horrores de concepto, una especie de listado de las razones del por qué de la “Star Wars Manía”.
Una historia atractiva
Sí, tal vez esté diciendo una obviedad con esto, pero vale hacer un pequeño análisis: ¿qué hay más genial que hombres que pueden usar “La Fuerza”, una especie de poder que todos añoramos tener, y que encima pelean con sables láser? Brazos perdidos por doquier, que nos importa muy poco. Agregale algunos elementos clave, como un villano perfecto, un protagonista épico y un maestro sabio, y tenés la fórmula perfecta.
El inicio de un culto
Si hay algo que hay que reconocerle a George Lucas, es que se supo adelantar a la época y fue este adelanto, con una combinación perfecta de historia con estética, lo que lo llevó al estrellato. Las películas fueron muy buenas, algunos actores (como Harrison Ford) se comían la pantalla, pero algo era clave: se estaba viviendo en ese momento el principio de un género propio, el “starwarsiano”, que combinaba la ciencia ficción con una excelente llegada a las masas
La originalidad del mundo creado
Seguramente la realidad de por qué cada día Star Wars tiene más allegados es claramente la deficiencia que el cine masivo está teniendo para crear una franquicia de culto o crear una historia atractiva. Estamos inundados de remakes, reboots o cosas basadas en libros con buenas ventas adolescentes, pero nadie se anima a escribir algo original para el cine a la altura de lo que se hacía antes. Por eso, muchísimas películas de antaño se siguen añorando y amando como en su fecha de estreno (y también es por esto que estamos tragando reboots o secuelas como buñuelos), como Star Wars, Star Trek, Back to the Future o Ghostbusters. Pero Star Wars se diferencia de este grupo, y por una simple razón: la extensión de su universo. Esta enorme magnitud ha hecho que se puedan realizar nueve películas, infinitos cómics y videojuegos que se complementaron con la historia. Y aún así, pese a la magnitud de este universo, la historia se nutre de un sólo elemento: la pelea contra el lado oscuro de la Fuerza, algo tan simple como el bien contra el mal. Sólo unos pocos genios, como Star Wars, pudieron combinar todo esto: su simplicidad es la clave.
La genialidad
Sí, ya no hay análisis que valga. La historia es genial, que posibilita muchísimas forma de allegarse a la misma (el mundo del merchandising con esta película da miedo) y que te deja re manija por una semana entera. Las películas están buenísimas (si, incluso los primeros tres episiodios. Es Star Wars, no me jodan), y amamos a todos los personajes. Sí, incluso a los Stormtroopers.
Amén.
